Los pantalones y las camisas que cuelgan en tu armario recorrieron un largo camino desde los extrusores y husillos girando dentro de una fábrica textil. Las máquinas utilizadas para la fabricación de prendas de vestir evolucionaron a procesos modernos en la industria como una forma de producir ropa a altas velocidades, bajos costos y calidad constante. Pero incluso con la tecnología moderna, algunas piezas de equipo pesado comparten protagonismo con las antiguas agujas e hilos utilizados por los costureros a mano.
La ropa pasa a través de corte, costura y máquinas de prensado antes de llegar a tu armario.
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